DIORAMA DE ECOSISTEMA RIBEREÑO
Concurso de Ideas para el Laboratorio ambiental Binacional de la CARU
El Concurso constituye una oportunidad de trasvasar el fin utilitario del programa para conferirle el significado que debe tener una actividad de tal importancia ambiental y de relacionamiento entre los dos países. Se ha intentado acercarse al proyecto desde una perspectiva que integre y explore sus posibilidades poéticas y comunicativas con los aspectos más técnicos. Para ello se utilizará como vector el concepto de “diorama”. Mediante este concepto se designa a una representación ficcional modelada que reproduce una escena real, usualmente integrada por personajes o figuras (reales o ficticios) inmersos en un paisaje significativo en relación a la acción.
La metáfora utilizada del “diorama” opera desde múltiples perspectivas:
A: El río como sujeto.
En el “diorama”, el sujeto es el elemento focal de la composición. El edificio propuesto genera, mediante la gran cubierta inundada y la composición vegetal circundante, el extrañamiento de transformar al paisaje del río y su ribera en dicho sujeto.
B: La miniaturización.
La reproducción miniaturizada es el elemento clave del “diorama”, lo que permite la confección de los mundos dentro de mundos que lo caracteriza. Así la cubierta se entiende como una representación condensada de la vida acuática del río. La cubierta es entonces, un mundo en miniatura, un jardín ribereño.
C: Lo real y lo ficcionado.
Lo real está presente, aunque siempre dando la sensación de haber abandonado la escena para dejar lugar a lo imaginario. Se ha intentado expresar entonces lo escondido, lo recóndito del paisaje ribereño mediante circulaciones al ras del agua que atraviesan islas de plantas acuáticas, rincones florales y laberintos de vegetación de mediana altura. Este ambiente naturalizado, contrasta con la misteriosa artificialidad de los exhaustores y chimeneas de los laboratorios, de verticalidad escultórica.
D: Figura y fondo.
Abandona aquí su clásica interpretación dicotómica. Así, el edificio opera como figura para las vistas desde el acceso sobre el fondo extenso del río y, a la inversa, su extensa repetición de módulos y la sombras profundas de sus aleros actúan como escenografía para las vistas cercanas de los elementos vegetales incorporados al norte del edificio.
E: Las variaciones de la mirada.
Esta ambigüedad también pretende ser funcional a las diferentes perspectivas a las que debe responder. Como en el “diorama”, el edificio se piensa para funcionar desde unas pocas vistas particulares.
F: El agua como elemento icónico y comunicador.
El agua intenta actuar como hilo conductor y elemento icónico del edificio.
Ubicación: Río Negro, Uruguay
Año: 2019
Metraje: 2.500m2
Proyecto: Fábrica de Paisaje + Ken Sei Fong | Colaboradores: Belén Bastos, Matías Chelle, Santiago Rodríguez